Primero van y ganan
una Eurocopa. Luego, un Mundial. Ahora, otra Eurocopa y metiéndole 4 a Italia
en la final. A Italia. Y ojo, que aún tienen edad para poder llegar al próximo mundial y liarla.
Decían que su juego era aburrido. Que no tenía profundidad. Que para qué jugar con dos medios centros. Que cómo se le ocurría a Del Bosque jugar sin 9. A ver si todos nos enteramos de una vez: esto es el fútbol total llevado a sus últimas
consecuencias. Una revolución futbolística dirigida por un visionario.
Por una vez voy a
citar a dos culés, porque tienen mucho que ver en este éxito:
Johan Cruyff: El secreto de
La Roja es que no es una selección, es un equipo.
Guardiola, a sus
jugadores: Si perdéis, seguiréis siendo los mejores; si ganáis, seréis eternos.
Este equipo no solo ha hecho historia. Ha
hecho leyenda.
Y sí, ya son eternos.
Reflexionando sobre los últimos éxitos del fútbol español y de la selección me viene una pregunta ¿y antes con qué fútbol mediocre nos contentábamos? Los que hemos visto nacer, crecer y culminar con triunfos esta manera de jugar nos hemos vuelto muy exigentes, nos parece fácil lo que hacen y quizás no valoremos la inmensa dificultad que supone ganar, como por ejemplo ayer, a toda una selección italiana sacándole los colores. Como dijo Alex Ferguson cuando en Barça ganó al Manchester: "Nunca nadie nos había dado una paliza así. Disfruten con sus triunfos y su fútbol, se lo merecen", pues eso, nadie nunca apalizó así a Italia disfrutemos, pues, con nuestros éxitos.
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